Llevo toda la semana dandole vueltas a cómo hacer un bizcocho de quinoa utilizando tan solo elementos naturales (evitando el uso de saborizantes y productos químicos para darle sabor) Y creo que he encontrado la receta perfecta, que me ha maravillado su sabor y su textura…. ¡Me ha recordado a los bizcochos que me comía cuando era una niña!
Encima la quinoa es un alimento realmente interesante. Os voy a hacer un pequeño resumen muy esquematizado de algunos de los beneficios que me resultan mas interesantes de este «pseudocereal»:
- Es muy alto en vitaminas y minerales. Sobretodo si utilizamos su versión integral. A parte de su alto contenido en fibra.
- Es una fuente de proteína vegetal completa. Contiene todos los aminoácidos esenciales (incluido la lisia) a si que es ideal en dietas fitness o veganas/vegetarianas. Sin necesidad de complementarlo con otro cereal o legumbre.
- No contiene gluten. Apto para celíacos.
- Es un carbohidrato de bajo indice glucémico y con una digestión mas lenta que otros cereales, por lo que nos ayudará a sentirnos saciados durante mas tiempo y tener un mayor control del apetito.
- Es alta en magnesio, hierro y potasio, minerales muy interesantes para la gente que practicamos deporte.
- Incluso hay estudios que relacionan el consumo de la quinoa con una aumento de la masa muscular ya que puede provocar un aumento de la hormona del crecimiento.
Dicho esto, creo que añadir la quinoa puede ser una genial idea para todas aquellas personas que intentan comer saludable o siguen una dieta fitness. Lo único negativo que tiene es su precio de venta… Pero en este caso, utilizaremos poca cantidad, por lo que un paquete nos va a durar bastante y la vamos a amortizar bien.
Esta receta en concreto; Apta para dietas en definición (aporte de carbohidratos moderado) y es ideal como desayuno ya que contiene todos los nutrientes necesarios para afrontar el día con energía y sobretodo las personas que entrenen por la mañana. Si entrenas por la tarde sería interesante como merienda.
INGREDIENTES (para un bizcocho que corresponde a una ración para una persona):
- 40g de harina de quinoa integral. Yo he usado la de la marca Viogrà.
- 150ml de claras de huevo
- 1 huevo campero
- 1/2 sobre de levadura química
- La ralladura de la piel de un limon mediano
- 1 cucharada de café de canela
- Sucralosa granulada
PROCESO:
- Precalentamos el horno a 180º
- En un bol mezclamos la harina de quinoa con la canela y el medio sobre de levadura
- En el recipiente que vayamos a batir, ponemos los 150ml de claras y le añadimos el edulcorante liquido o stevia al gusto. Yo le puse unos 6 chorros. Y con una batidora de varillas ponemos las claras a punto de nieve.
- Le añadimos el huevo entero y volvemos a batir hasta que vuelva a estar a punto de nieve.
- Con la ayuda de una cuchara vamos añadiendo pequeñas cucharadas de la mezcla de la harina junto con un poco de la ralladura de limón. Yo fui añadiendo cucharada pequeña de harina un poquito de ralladura hasta acabarlo todo. Lo hice sin batir, simplemente con la ayuda de las varillas paradas y con movimientos envolventes… Para evitar que bajasen las claras.
- Colocamos la mezcla en un molde de silicona. Yo utilicé uno de unas medidas de 22×13 aproximadamente.
- Y horneamos durante 25minutos a 180º
- Cuando este listo, lo sacamos del horno y dejamos que se enfríe durante unos 10minutos en el molde, cerca del calor del horno.
- Una vez e haya enfriado un poco, demoldamos le damos la vuelta y lo tapamos con un trapo de tela.
- Cuando ya esté totalmente frio, envolvemos con papel de aluminio para conservarlo si quereis comerlo al día siguiente 🙂
Y listo el bizcocho, como resultado un aspecto muy cremoso y un sabor que me ha recordado muchísimo al bizcocho tradicional. Espero que os guste!
Valores nutricionales (bizcocho entero)
Proteinas: 30,8g
Grasas: 7,7g
Hidratos de carbono: 32,8g
TOTAL CALORIAS: 324 kcal